En la actualidad se habla mucho de salud mental y emocional, y de diferentes formas de desarrollarla o mejorarla. Una de ellas consiste en realización de actividades de recreación, ocio o esparcimiento.
Salazar-Salas (2017), define la recreación como:
El conjunto de actividades agradables, lúdicas y que producen gozo, alegría y placer. Estas se realizan durante el tiempo libre y cada persona selección en cuáles y cuando desea participar. Estas actividades promueven el desarrollo integral, por los beneficios que los individuos obtienen para mejorar su calidad de vida y por la autorrealización que logran (p. 6).
Salazar-Salas (2017) describe 10 tipos diferentes de actividades recreativas, estas son: la recreación física, social, artística, al aire libre, intelectual, educativa, turística, espiritual, voluntariados y pasatiempos. En esta última se ubica un tipo de actividad recreativa que está muy de moda en los últimos años y son los juegos de mesa.
La recreación por sí sola tiene muchos beneficios. Brown (2016) menciona que algunos de ellos son la salud mental, emocional y física, el rejuvenecimiento de la mente el aprendizaje que se obtiene sobre lugares o personas, y la creación de los lazos entre la familia y las amistades.
Ahora bien, los juegos de mesa y sobre todo juegos de mesa “no tradicionales” ofrecen beneficios adicionales como por ejemplo el desarrollo de habilidades de negociación, de estrategia, de toma de decisiones y otras habilidades para la vida que van a ser de suma importancia en el mundo laboral y en la vida cotidiana.
Otros beneficios son la generación de endorfinas, conocida como la “hormona de la felicidad” y neurotransmisores como la dopamina y la serotonina.
De acuerdo con Garrido-Sánchez y Crisol-Moya (2023), dentro de los beneficios que trae consigo la metodología de “Aprendizaje Basado en el Juego” está que mejora el rendimiento de las personas participantes, despierta el interés, la curiosidad, dota a quienes juegan de seguridad, como consecuencia de la sensación de control que el juego les proporciona.
Garrido-Sánchez y Crisol-Moya (2023) también mencionan que los juegos de mesa fomentan la creatividad, la resolución de conflictos, la sana competitividad, el compromiso, la motivación, la cohesión grupal y los logros personales y colectivos.
Sin duda alguna, los beneficios de los juegos de mesa son muchos, pero lo más importante podría ser la interacción que se genera entre las personas participantes, ya que las “saca” de su zona de confort e individualidad, del exceso de virtualidad – la cual no es mala, siempre y cuando sea con moderación – y permite el mejoramiento de la salud física, mental y emocional.
Referencias Bibliográficas
Brown, P. (2016). The benefits of leisure and recreation. Journal of Parks and Recreation Administration, 34(4), 103-105. http://web.a.ebscohost.com/ehost/pdfviewer/pdfviewer?vid=10&sid=c2800ecc-018a-4b16-a82f-b0a85a974515%40sessionmgr4010
Garrido-Sánchez, A. y Crisol-Moya, E. (2023). Revisión sistemática: beneficios de los juegos de mesa en el ámbito de la educación social con menores de entre 6 y 18 años. Education in the Knowledge Society, 24(2023), 1-17.
Salazar-Salas, C. G. (2017). Recreación (2da. ed.). Editorial UCR.